La palabra amuleto se refiere a objetos de tamaño pequeño o mediano que sirven para protegernos de energías negativas, y que podemos llevar con nosotros en forma de pulseras, colgantes, u otros abalorios. Su origen etimológico está vinculado a los términos árabes amolori, que significa ahuyentar o eliminar. En egipcio, los términos para referirse a estos objetos eran mk-t, que significa “protector”, o udjau, “aquello que fortalece”. Los egipcios creían firmemente en el concepto “como es arriba es abajo”, como simbolismo de que el cuerpo material y el espiritual estaban conectados, al igual que la vida en el reino de los dioses y el mundo terrenal. (Texto de Kiss Cassanya en Anuario Cassanya 2014-15)
Este talismán-amuleto contiene tres elementos mágicos:
La Luna reina sobre todo cuanto acontece en el mundo sublunar y ha sido adorada desde el principio de los tiempos por todas las civilizaciones, atraídas por la magia de su luz y sus diferentes fases.
Admirada y advocada bajo múltiples formas y nombres (Isis, Diana, Astarté, Hécate, Cibeles…) hasta dar origen a la figura de la Virgen, la Luna es la Gran Diosa, la Gran Madre.
Ella rige el mundo de las emociones y del subconsciente, que dominan gran parte de la vida y del destino. Símbolo del eterno femenino, representa la diosa que hay en tu interior.
La triple diosa -representada con las tres formas lunares de esta joya- apela a las tres fases visibles de la Luna y, por tanto, una triple energía para crecer, lograr la plenitud y alcanzar la sabiduría. Algo que se asocia también con las tres etapas de la mujer, cuando es joven y está creciendo como una promesa, cuando llega a la madurez y, con frecuencia, a la maternidad, y cuando ya vuelve a estar libre de ataduras, se conoce mucho mejor y es más sabia.
La piedra luna -en el centro de la joya- se usa para regular los ciclos, equilibrar o sanar las emociones y todo cuanto corresponde al mundo femenino, ya sea en un sentido físico o anímico. Es una maravillosa guardiana de la intimidad. Además, esta piedra tiene una medida de 7 milímetros de diámetro, número mágico por excelencia y días que dura cada fase lunar.
Todo ello sobre un fondo con ondas que representa el agua, asociada a la Luna y las emociones.
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Descripción
- Colgante de plata de ley y piedra luna con adularescencia. De 4 cm. de ancho y más de 2 milímetros de grosor.
- Este artículo no incluye la cadena.
- Esta joya se envía con un estuche.
- No se admiten devoluciones por cuestiones energéticas. Antes de enviarlas, nosotros les damos un baño de luna y de ahí las cogemos con unos guantes de algodón y las guardamos en el estuche para el envío.
- Envío por mensajero en 24-48 horas.
- Envío 5€ a península. Consultar para otros destinos.
